IU quiere que el Ayuntamiento apoye a las y los jóvenes investigadores y evite su dispersión.

  • Ana Castaño: “Los jóvenes que se han formado durante años no encuentran posibilidades de desarrollar su labor investigadora en su país o están condenados a la inestabilidad y la precariedad laboral”.

La concejala de IU Xixón Ana Castaño presentó una proposición de acuerdo para contribuir al impulso de la investigación y el desarrollo en el Estado Español y, sobre todo, apoyar a los jóvenes investigadores que hoy en día tienen enormes dificultades para desarrollar su labor en su propio país. Esta iniciativa, relacionada con la precariedad que afecta a los investigadores, se enmarca en una campaña a nivel estatal que se está presentando en todos los ayuntamientos.

Castaño lamentó “la reducción que ha habido en el presupuesto de investigación y desarrollo entre 2010 y 2016 está en torno a los 2.800 millones de euros”, cortando la evolución de uan situación que, “sin ser excelente, había mejorado comparado con años atrás”. La edil deploró que “los jóvenes que se han formado durante años no encuentren posibilidades de desarrollar su labor investigadora en su país, o en caso de que tengan atisbo de posibilidad, están condenados a la inestabilidad y la precariedad laboral”.

Aunque la edil considera “positivo” cierto nivel de intercambios y salir de la cercanía, ve preocupante que “todo ese caudal de experiencia y formación que este país ha trabajado esté desperdigado por la Unión Europea o EEUU y no tengan ningún viso de volver ni que esa experiencia revierta en nuestro país”.

“Frente a un modelo donde el crecimiento se va a centrar el turismo y los empleos vinculados a la hostelería” declaró Castaño, “abogamos por otra forma de desarrollo económico centrada en la investigación y el desarrollo. Es preciso articular un pacto por la ciencia que haga que todo ese caudal de investigadores retorne a nuestro país”.

La iniciativa incluye medidas instando al Gobierno Autonómico a eliminar los límites en la tasa de reposición para facilitar la incorporación de nuevos jóvenes investigadores y la elaboración de un censo de gijoneses que se han tenido que ir para buscar una oportunidad en sus ocupaciones, tratando así de conocer con más precisión la magnitud del problema.